Eres la mujer de mi vida sin pertenecer a ella.
Es increíble cuánto puedes querer a una persona que no existe.
Cómo te imaginas las situaciones como si ella estuviese. Creyendo que sus manos están vivas.
Como si pensara, hablara, sintiese.
Eres fantástica, la persona con más poder que conozco. Y no te conozco desde hace años.
Me inspiras para sonreír.
Y esto es el amor verdadero.
Sigues viva aquí y en un millón de sitios.
Me gusta pensarte como los colores, sin entenderte pero maravillándome de su longitud de onda. Sabiendo que no existen como los entiendo pero descubriendo nuevos contrastes dependiendo de la luz.
Es increíble cuánto puedes querer a una persona que no existe. Aunque existió y la recuerdes viva.
Ojalá que tus ojos azules se camuflen con el cielo para hacerlo aún más bonito.
Ojalá que tu voz rota acompañe a las melodías más bellas para que sean más puras.
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